EL GLAUCOMA ES UNA LESIÓN SILENCIOSA QUE CUANDO APARECE SIN SER DETECTADA PROVOCA LESIONES EN EL OJO QUE PUEDEN DERIVAR EN UNA PÉRDIDA TOTAL DE LA VISIÓN. UNA ELEVADA PRESIÓN INTRAOCULAR PUEDE SER CAUSA DIRECTA DE ESTA PATOLOGÍA.
El glaucoma es una enfermedad ocular compleja que involucra múltiples factores y presenta características específicas, como daño del nervio óptico y pérdida del campo visual.
Si bien el aumento de presión dentro del ojo (llamada presión intraocular) generalmente está presente en los casos de glaucoma, los pacientes con presión intraocular dentro del rango normal también pueden desarrollar glaucoma.
Al principio, el glaucoma no tiene síntomas. No causa dolor y la visión se mantiene normal. Sin embargo, si el glaucoma no es atendido, las personas empiezan a notar que ya no ven como antes.
Sin tratamiento, las personas con glaucoma pierden lentamente su visión lateral y es como si estuvieran viendo a través de un túnel. Con el tiempo, la visión central también puede disminuir hasta que se pierde por completo en un ojo o en ambos.
La presión ocular normal varía entre 12 y 22 mm Hg, y la presión ocular que supere los 22 mm Hg se considera superior a la normal. Cuando la presión es superior a los valores normales, pero la persona no muestra signos de glaucoma, se denomina hipertensión ocular.
La presión ocular elevada, por sí sola no provoca glaucoma. Sin embargo es un importante factor de riesgo. Por ello los pacientes que tengan presión ocular elevada deben someterse a exámenes oculares integrales y periódicos a fin de controlar la presencia de signos que indiquen la aparición de glaucoma.
Si presenta un riesgo elevado de desarrollar glaucoma (antecedentes familiares, edad avanzada,..) debe realizarse un examen ocular completo visitándonos en Marta Castrillo Óptica, donde a través de un instrumento llamado tonómetro podremos medir su presión intraocular.